El padre José Sesma, que fue Provincial (1976-1985), y también ocupó el cargo de Director del Departamento de Pastoral Penitenciaria de la CEE (1992-2015), es una voz autorizada y respetada dentro del mundo de la pastoral penitenciaria. A las puertas de los 800 años de la creación de la Orden, el mercedario profundiza y explica los orígenes y el futuro de nuestra pastoral.

“La provincia de Aragón, en el campo de la Pastoral Penitenciaria, siempre ha tenido un profeta, el padre Bienvenido Lahoz, que lo vivió, y además nos lo anunció. Desde el año 1940 él siempre procuro que la pastoral se fuera desarrollando a través de los campos de prevención, prisión y reinserción, y en la área religiosa, social y jurídica”, apunta el padre Sesma.

A través de estas tres vertientes, el antes, el durante y el después, podemos resumir y simplificar nuestra extensa acción social. Unos programas integrales enfocados al mundo penitenciario que van desde el origen del problema, a través de la educación, hasta después de su solución, apostando por la reinserción de las personas que les ha quedado totalmente truncada la vida. “Esto es lo que nosotros como Orden aportamos a la Iglesia. Fuimos creados para la libertad, tanto para las persones privadas de libertad, como las que tienen el riesgo de perderla”, remarca el ex provincial.

Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral

«La pastoral penitenciaria está en un proceso constante de desarrollo», apunta José Sesma. Hay algunos hechos que así lo constatan, como la creación del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral. “Tenemos una gran esperanza en este departamento que ha creado el Papa Francisco. De forma que no solo haya una pastoral penitenciara en España, sino de Europa y del mundo para que se pueda trabajar coordinadamente en el campo de la libertad desde todas las conferencias episcopales y en consecuencia desde todas las diócesis y desde todas las parroquias. De este modo se multiplican los agentes y se aúnan esfuerzos”, asegura el mercedario.

Se trata de un dicasterio de la curia romana instituido por el Papa Francisco el 17 de agosto de 2016, en el marco de la reforma de algunos organismos, impulsada por el Papa con la ayuda de un Consejo de Cardenales, para adaptar mejor el trabajo de la Santa Sede a las necesidades y el contexto actual

En el nuevo dicasterio confluyen, las competencias de los Consejos Pontificios Justicia y Paz; «Cor unum»; para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes; y para la Pastoral de la Salud, que cesan en sus funciones desde esa fecha. Es competente también en las relaciones con la Caritas internationalis.

Se encarga, por tanto, de todo lo que se refiere a la justicia y la paz, las migraciones, la salud, las obras de caridad y el cuidado de la creación, y manifiesta su solicitud por los más necesitados, en el marco de la doctrina social de la Iglesia, que promueve.

Apertura al mundo

La Fundación está tratando de hacerse presente en el mundo penitenciario donde está establecida la corona de Aragón, Baleares, Valencia y Catalunya. «Estamos llevando a cabo la labor del Padre Bienvenido Lahoz. Además, se ha transferido a otros países, como son Mozambique, Venezuela, Panamá, Guatemala y El Salvador, de tal forma que esta visión de la pastoral penitenciaria se está comunicando en estos países». Pienso que es una gran aportación de la provincia” concluye el padre Sesma.