Inauguración de una nueva Capilla en el Centro de Detención «Tinajitas», Panamá
El arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa Mendieta, bendice la nueva Capilla del Centro de Detención «Tinajitas» destinada al encuentro de todas aquellas personas privadas de libertad que necesiten un consuelo y una esperanza
«Para Cristo no hay muralla, puertas ni ninguna celda tan cerrada para que su presencia pueda visitar y llegar al corazón de cada hombre y mujer para brindarle consuelo y esperanza en medio de las frustraciones y preocupaciones. Queridos hermanos, a pesar de estar privados de libertad, jamás olviden que ustedes conservan completamente integro su valor, su dignidad como persona, aunque hayan hecho mal uso de ella», expresó el arzobispo de Panamá José Domingo Ulloa Mendieta, al bendecir la nueva Capilla del Centro de Detención «Tinajitas», ubicado en el corregimiento de Belisario Frías en el Distrito de San Miguelito, este lunes 18 de marzo.
La nueva Capilla será ese lugar de encuentro tanto para personas creyentes y no creyentes, a cargo de la Pastoral Penitenciaria de la Arquidiócesis a través de la Orden de los Frailes Mercedarios.
En este acto asistieron: Belitza Pérez, subdirectora General del Sistema Penitenciario, Eliécer González, jefe del departamento de Tratamiento y Rehabilitación del Sistema Penitenciario y Yesenia Núñez, directora del Centro de Rehabilitación de Tinajitas. Todos ellos acompañados por los religiosos mercedarios P. Javier Mañas y P. Francisco Javier Palomares, a parte del arzobispo de Panamá.
La inauguración de esta nueva capilla para los privados de libertad representa varios aspectos importantes:
– Espacio para la práctica religiosa: La capilla proporciona un lugar donde todos ellos puedan practicar su fe y participar en actividades religiosas, así como encontrar consuelo, esperanza y apoyo espiritual durante su tiempo en detención.
– Bienestar emocional y espiritual: La existencia de la capilla puede contribuir al bienestar emocional y espiritual de los privados de libertad. La participación en actividades religiosas y la conexión con su fe pueden ayudarles a encontrar sentido y propósito durante un período difícil de sus vidas.
– Rehabilitación y reinserción: La presencia de una capilla dentro del centro de detención puede formar parte de los esfuerzos de rehabilitación y reinserción de los individuos privados de libertad. La participación en programas religiosos y actividades espirituales a menudo se asocia con una reducción de la reincidencia y una mayor adaptación positiva a la sociedad tras su liberación.
– Humanización del entorno: La apertura de una capilla en el centro de detención también puede contribuir a humanizar el entorno penitenciario. Proporciona un espacio que va más allá de lo puramente funcional, reconociendo la importancia de la dimensión espiritual y religiosa en la vida de estas personas.
En resumen, la inauguración de esta capilla en el Centro de Detención «Tinajitas» para los privados de libertad representa un paso hacia la provisión de apoyo emocional, espiritual y de rehabilitación dentro del sistema de justicia penal, reconociendo la dignidad y las necesidades de estas personas que sufren tanto en soledad.