Lucía Escriva en Catalunya Religió: «Debido al nuevo brote en Lleida ya no nos dejan entrar en la cárcel»
Otro paso atrás en Lleida. La Generalitat ha suspendido las visitas de locutorio, los vis a vis y los permisos de salida en el Centro Penitenciario de Ponent (Lleida) mientras dure el confinamiento de la comarca del Segrià.
La Conselleria de Justícia ha explicado en un comunicado este lunes que las familias de los presos tampoco podrán ir a la cárcel para llevar paquetes ni hacer transferencias de forma presencial. También están a la espera los trabajadores y voluntarios del Centro Penitenciario de Ponent. El 29 de junio se reanudó la actividad con los presos, pero con el retorno a la fase 2, ni trabajadores ni voluntarios ni curas pueden acceder al centro.
Sin acceso en prisión
Lucía Escrivá es educadora social del hogar de acogida que la Obra Mercedaria tiene en Lleida para los reclusos que salen con permisos o que están en régimen de semilibertad. Durante el confinamiento han trabajado desde casa, en contacto con los presos a través de llamadas telefónicas, correo y videoconferencia. El piso, ubicado cerca de la parroquia de la Virgen de la Merced, ofrece siete plazas para facilitar su reintegración social. Son seis internos y un educador. La educadora explica que los fines de semana está lleno, y que ahora tienen un preso que ha pasado todo el confinamiento. A partir de ahora verán cómo deben proceder. «Estamos a la espera, hoy ya no nos han dejado entrar», apunta Escrivá.
Entre las diversas iniciativas impulsadas por el obispado de Lleida durante la pandemia, está el recurso del Teléfono de Escucha. Un servicio que da apoyo a personas que estén sufriendo ya sea debido a la soledad, de pérdidas familiares o de los efectos económicos de la crisis de la Covidien-19. Todo apunta a que deberán atender muchas más llamadas los próximos días.
En este ENLACE puedes leer el reportaje completo de Catalunya Religió en el que analiza cómo la Iglesia de Lleida está ayudando en estos tiempos de pandemia.
Vuelven las videollamadas
Como ya hicieron todas las prisiones catalanas durante el estado de alarma, la cárcel de Ponent compensará la falta de visitas con videollamadas, y los presos podrán hacer el doble de llamadas telefónicas de lo habitual (20 en lugar de 10 por semana).
También se han aplazado los permisos aprobados para los presos que ya han cumplido la primera cuarta parte de la pena, y también se suspenden los traslados con origen o destino a esta prisión.
Ocho funcionaarios y un preso, contagiados
En Catalunya hay 27 funcionarios de prisiones enfermos de coronavirus, 8 de ellos trabajadores del Centro Penitenciario Ponent, y 5 presos enfermos en total, uno de ellos ingresado en la enfermería de esta prisión.
Los nuevos presos que ingresen en el centro deberán pasar 14 días de cuarentena, y también lo harán los que salgan para ir al juzgado, al hospital o a trabajar.
La cárcel también ha suspendido las actividades con entidades y voluntarios para limitar las entradas y salidas de personas.