La intervención social pone el objetivo en la recuperación de la capacidad de adaptarse al entorno de libertad y en la reanudación del control de la propia vida de las personas que han estado privadas de libertad. En los Hogares de Acogida se trabaja en esta dirección: que los residentes puedan poco a poco encontrar ese camino que los conecte con ellos mismos y puedan volver a empezar con más fuerza que nunca.

El cariño y el calor de un hogar son fundamentales en este proceso de adaptación, ya que sentirse arropado y querido ayuda en su confianza. Y así fue la cena de Navidad que celebramos con los chicos del Hogar Mercedario de Sant Feliu, Llar La Mercè, y los residentes de los pisos del proyecto Enllaç. Fue una noche divertida, con música, con baile, con buena comida. En definitiva, hicimos una cena con todo lo que no puede faltar cuando nos reunimos un grupo de amigos. En este caso, los profesionales de las dos instituciones y los residentes de los Hogares de Acogida.

Cena en Llar la Mercè

Debemos tomar conciencia de lo que supone la restricción de la libertad para una persona, los efectos del encarcelamiento. Debemos trabajar para que todos ellos puedan recuperar la capacidad de decisión. Cuando no has pasado por esta situación, te sorprende ver lo difícil que es para ellos tomar decisiones, seguir unos horarios, pensar que pueden salir y entrar cuando quieran e ir donde quieran, el desconocimiento de las nuevas tecnologías como el móvil, las dificultades de gestionar el dinero …

Proyecto Enllaç

El proyecto Enllaç nace con la voluntad de promover equipamientos y recursos de alojamiento residencial temporal dignos y adecuados destinados a las personas excarceladas en situación de exclusión social que no disponen de apoyo familiar o red relacional y están en seguimiento por parte de las entidades relacionadas con el proyecto. Cuando una persona es excarcelada y no dispone de recursos económicos, ni red de apoyo, es necesario que pueda vivir en un espacio adecuado, hasta llegar a ser plenamente autónoma.