Presentación del libro «Condenas compartidas» de Núria Ortín en la cárcel La Modelo
En un escenario emblemático como es la cárcel de La Modelo de Barcelona, tuvo lugar la presentación del libro «Condenas compartidas» de la autora Núria Ortín, directora de la Fundación Obra Mercedaria
El evento fue un éxito de público a pesar del día lluvioso y del frío que hacía en la propia cárcel
El pasado martes 13 de diciembre, a las 19h de la tarde, en la histórica cárcel La Modelo de Barcelona, tuvo lugar la presentación del libro «Condenas compartidas (Vidas de entrega, lucha y superación en un mundo hostil e invisible)» de la autora Núria Ortín, directora de la Fundación Obra Mercedaria.
Fue un día lluvioso y frío, además había partido de semifinales del Mundial de fútbol, por no decir que era «martes y trece», pero a pesar de todo, la gente acudió en masa. Más de 150 personas compartieron el exitoso acto. Asistieron familiares, amigos, conocidos y anónimos; trabajadores y voluntarios de la Fundación; algunos autoridades como por ejemplo el Secretario de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima del Departamento de Justicia de la Generalitat de Catalunya, el Sr. Amand Calderó, y el director de Asuntos Religiosos, el Sr. Carles Armengol; profesionales del mundo penitenciario, como la directora del C.P. de Wad-Ras, Soledad Prieto, algunos funcionarios, trabajadores y educadores sociales, internos e exinternos; la presencia de algunos mercedarios de la Orden de la Merced; y algunos medios de comunicación.
Después de un emocionante audio de 5 minutos, en el que se podía escuchar una frase corta de cada uno de los 33 testimonios que aparecen en el libro, empezó, puntual, la presentación del libro. La autora estaba acompañada del Padre Provincial y presidente de la Fundación, José Juan Galve, y dos testimonios que aparecen en el libro, Alphonse, exinterno de Zaragoza, y actualmente usuario en nuestro hogar de acogida «Llar la Mercè», y Jordan, interno de Brians 2 y anteriormente en Jóvenes.
(este es el audio):
Fue una presentación muy emotiva, desde el corazón, igual que el libro; muy acorde con la personalidad de la autora, una persona positiva y muy alegre.
Hora y pico de mucha reflexión y de un claro mensaje por parte de los 4 interlocutores: lo más importante siempre es la persona, por encima de cualquier prejuicio y recelo.
Hubo momentos para todo, pero las intervenciones de los testimonios fueron momentos bastante desgarradores y a la vez sensibles, como cuando uno de ellos invitó a un niño pequeño, Pau, a participar de la presentación, y el otro testimonio fue abrazado por una persona del público que le dirigió unas impactantes palabras. Y es que también algunas personas del público intervinieron, todas ellas con mensajes de apoyo.
Recalcar también la intervención del padre mercedario Vicente Zamora que tuvo unas palabras bellísimas dedicadas a la autora y por último las de la hija de esta, Andrea, que fueron pura emoción.
En este libro, una parte de los testimonios que en él aparecen, son personas que han sufrido mucho; personas que nos han querido explicar sus vivencias y sus sentimientos, muchas veces desde el dolor más profundo.
Por otra parte, están los religiosos mercedarios, personas con una vocación y un carisma muy definidos: acompañar y ayudar al que más lo necesita; estar a su lado, sin prejuzgar, viendo en cada preso el rostro de Cristo. Son una luz que ilumina su oscuridad, un apoyo fundamental e incondicional. En definitiva, personas que luchan por la libertad y la dignidad de las personas privadas de libertad.
La autora entrevistó a cada uno de los protagonistas, siempre desde la empatía, convirtiéndose, por momentos, en una especie de confesora para todos ellos.
Siempre llegaba a las entrevistas con una sonrisa en la cara y, de esta manera y desde el máximo respeto, afrontaba esos duros momentos sacándole hierro al asunto y convirtiéndola en una distendida entrevista.
Muchos son los temas que se tocan: amor, indefensión, respeto, soledad, compañerismo, rabia, resiliencia, miedo, esperanza, odio, misericordia, arrepentimiento, perdón…
El libro, en definitiva, es un altavoz que da luz y visibilidad a este mundo de las cárceles.
