Privados de libertad reciben los sacramentos en la prisión de La Nueva Joya
En un día festivo dedicado a la Virgen de la Merced, 134 presos de la cárcel La Nueva Joya, en Panamá, pudieron dar un paso de fe en la religión católica a través de 14 bautizos, 56 primeras comuniones y 64 confirmaciones
Un total de 134 personas privadas de libertad del centro penitenciario La Nueva Joya dieron un paso de fe en la religión católica al bautizarse, realizar la primera comunión y confirmación, ceremonia que presidió monseñor José Domingo Ulloa, Arzobispo de Panamá, en conmemoración de la Semana del Privado de Libertad en el día de la Virgen de la Merced. También estuvo presente el capellán de la prisión y mercedario Fr. Francisco Javier Palomares.
Belitza Pérez, directora General encargada del Sistema Penitenciario, indicó que «la entidad acompaña a este grupo de privados de libertad que inician su fe cristiana, por lo que estamos contentos y agradecidos por el trabajo que realiza la Pastoral Penitenciaria en los centros penitenciarios y como lo dijo Monseñor, la reclusión no es exclusión y la institución entiende esto perfectamente».
En el sermón, monseñor Ulloa recalcó que «para la iglesia es muy importante acompañar y animar la vida de los privados de libertad, cumpliendo los mandatos establecidos en los evangelios «. El líder católico recalcó que «la reclusión es un paso a la reinserción social, donde los privados de libertad reconocen su culpa y piden una oportunidad».
Mientras que el privado de libertad, Wilder Vásquez, dijo sentirse orgulloso por haber logrado dar ese paso importante de renovar sus votos a través del bautizo y la primera comunión.
Se bautizaron 14 privados de libertad; 56, hicieron su primera comunión; y 64, la confirmación.